Si vas a ver esta película ya te sabes el final.
Esto no es un problema si lo que quieres es acercarte al genio de Shakespeare y tratar de entender por qué este autor está consideardo a través de las generaciones como uno de los espeleólogos que más profundamente han descendido por la sima de los sentimientos y por los recovecos del alma. Si tu intención era esta, amable lector, deseo que no te sientas tan decepcionado como yo.
A cambio de esta, para mi irreemplazable pérdida, hay que reconocerle a la película una exhibición de paisajes escoceses francamente notable y una afición a la sangre más en el estilo Tarantino que en el obligatoriamente restringido del teatro del siglo XVII.
Creo que la película adolece de excesivas concesiones al gusto del respetable público actual, del que yo me excluyo para tratar de buscar refugio en la "inmensa minoría".
Hace muchos años, los únicos que en el cine se pintaban la cara para la guerra eran los pieles rojas. Desde que el ilustrado Mel Gibson "demostró" que William Wallace y sus aguerridos seguidores se pintarrajeaban la cara de azul, ya es un hecho "histórico" probado que Macbeth también. Supongo que pronto veremos una película sobre Wifredo el Pilos con la cara cuatribarrada y una estrella en la frente.
El llevar una espada en la espalda tampoco pertenece, que yo sepa, a la iconografía de los antiguos caballeros cristianos, ni la vestimenta de estos recordaba a la de los samurais. Espero que Justin Kurzel, el director, no se haya inspirado en Aguila Roja para incorporar estas actualizaciones.
Por último, el personaje de Lady Macbeth aquí queda como una mala de serie de tv. Recuerdo con nostalgia la homónima de Orson Welles en la cual la relación entre Macbeth y su esposa es un paradigma de influencia maligna, más de acuerdo creo con la intención del autor.
No se si existe versión doblada, yo he visto la versión en inglés con subtitulos y me ha costado seguirla ya que el ritmo de los diálogos es más cinematográfico que teatral. Ojo también a los personajes en pantalla porque Macbeth y McDuff se parecen fisicamente sobre todo con la cara pintada de negro, son rubios, llevan el pelo corto, van vestidos igual y al final sabes quien muere porque ya te sabias el final.
Si te interesa Shakespeare, lo mejor es que vayas tu mismo a verla y luego me cuentas
Tras leer tu comentario sobre esta última versión de "Macbeth", tengo una terrible duda:
ResponderEliminarCreerte y ahorrarme el soponcio de ver defraudada mi esperanza de disfrutar de una puñetera vez con una buena versión moderna (vamos, por decir algo, "en color") de una entre las obras del gran Shakespeare que más me entusiasman (aclaro: por más "polanskiano" que yo sea y así me haya declarado, no me gustó la versión que Roman realizó en 1971, a lo peor porque no me convenció en absoluto su protagonista, Jon Finch, actor felizmente olvidado)
o
Mantener mi inagotable optimismo e ir a verla, esperando que no hayas acertado en tu diagnóstico y me guste, aunque no sea perfecta.
Como no tengo abuela y me considero infinitamente más inteligente que el Presidente Garrett Walker, cosa al alcance de hasta Forrest Gump (esta comparación sólo es inteligible para los que hayáis visto las dos primera temporadas de la serie americana "House of Cards", pero viene aquí muy bien la referencia por su presunta inspiración precisamente en "Macbeth") me inclino firmemente a creerte porque nunca me has defraudado en tus juicios (bueno, un punto sí por no coincidir totalmente respecto a "Lunas de hiel", hablando de Polanski).
Moraleja: No pienso ir a verla al cine "en vivo" y eso aconsejaré al que me pregunte mi opinión, que con altísima probabilidad confirmaré cuando la vea en TV en unos pocos años.
¿O es que no voy a ser solidario con un Space Cowboy?.
Manrique
Creo que hay una alusión directa a mi comentario sobre la serie americana House of cards, por lo que voy a explicar en qué veo la relación de Macbeth con dicha serie:
ResponderEliminarEn el acto I escena II el rey Duncan es informado que el bravo Macbeth .ha vencido a los traidores en una sangrienta batalla.
En la escena IV, Duncan se queja de la traición de Cawdor y dice: Era un caballero en quien yo deposite una absoluta confianza.
A continuación recibe a Banquo,(que también había participado en la batalla) y a Macbeth, y los llama hijos míos, deudos y thanes,( thanes era un antiguo título el más importante en Escocia, no sólo honorífico sino de poder y riqueza). Pero, a la vez les informa de que va a nombrar a su hijo primogénito Malcolm heredero suyo y le nombra príncipe de Cumberland.
Duncan decide partir para Inverness, residencia de Macbeth, a fin de aumentar todavía sus obligaciones. Macbeth le solicita, humildemente, adelantarse para informar a su esposa y regocijar sus oídos
Macbeth, en un aparte dice:
¡Principe de Cumberland!... ¡Barrera es esta que debo saltar, o tropezaré, pues corta mi camino!...
En la escena V, Macbeth se encuentra con su esposa y le informa de la próxima llegada de Duncan y de que partirá al día siguiente. Lady Macbeth reacciona de la siguiente forma.
¡Oh, jamás verá el sol ese mañana!... Vuestro rostro, thane mío, es un libro donde los hombres pueden leer extrañas cosas...Para engañar al mundo, pareced como el mundo. Llevad la bienvenida en los ojos, en la lengua, en las manos, y presentaos como una flor de inocencia; pero sed como la serpiente que se esconde bajo esa flor...Ocupémonos del que viene; y en gran negocio de esta noche, a todas nuestras noches, a todos nuestros días futuros, dará pujanza y dominación soberanas; dejadme a mí el encargo.
En la siguiente escena Duncan delante del castillo de Macbeth muestra su placer de encontrarse en tan pintoresco lugar, de aire suave y apacible, su sola presencia halaga nuestros finos sentidos. Aparece Lady Macbeth y se refiere a ella como honorable hospedadora, disculpándose por las posibles molestias causadas
En la escena VII Macbeth muestra dudas y le expresa a su esposa su deseo de no seguir adelante ya que el rey le ha colmado de honores. Pero lady Macbeth pone en duda el valor de Macbeth y apela a su frágil amor, ¿Tienes miedo de ser el mismo en ánimo y en obras que en deseos? ¿Quisieras poseer lo que estimas el ornamento de la vida y vivir como un cobarde en tu propia estima, dejando que un "No me atrevo" vaya en pos del "Yo quisiera"
Y Macbeth responde:
¡Silencio, por favor!. Me atrevo a lo que se atreva un hombre; quien se atreva a más no lo es.
Cuando se habla de trasunto o referencia, quiere decir que por encima de la anécdota se encuentra el mensaje subliminal y es en ésto donde reside la semejanza.
No he visto la nueva versión de Macbeth, supongo que a algunos gustará y a otros no, pero ésto nada tiene que ver con encontrar personajes shakesperianos en la literatura o el cine actual.
Ana
Macbeth 2015
ResponderEliminarCon tres años de retraso he visto esta versión cinematográfica de la tragedia de Shakespeare. Me pareció lenta, malísima interpretación, ignoraron demasiados diálogos y modificaron algunos personajes del texto original: no sé qué sentido tiene añadir una bruja niña de más. En cuanto a la estética sólo regular; no justifica el texto, escenas demasiado sangrientas que, sin embargo, Shakespeare elude.
A algunos de vosotros os pasé ayer por la tarde un doble aviso urgente, vía Whatsapp, sobre la alta calidad del capítulo que iban a emitir, inmediatamente en La 2, de la serie "Montalbano" y el presunto interés que podía tener ver a continuación de aquél la última versión cinematográfica de "Macbeth", rodada por Justin Kurzel en 2015, que yo no había visto aún.
ResponderEliminarA los que avisé, me siento obligado a pediros disculpas por sugeriros ver esta última sin tener la mínima certeza de su posible calidad, aunque sí os trasmití junto con el aviso mis dudas sobre la misma.
Por fin vi ayer este "Macbeth" y tras hacerlo lo juzgué con igual o mayor dureza que la que empleó Rogelio hace dos años, como una mala película, lo que resulta tanto más grave en cuanto es evidente que director y equipo han contado con los medios técnicos para lograr la mejor versión cinematográfica a la fecha de esta tragedia, cinta que ha obtenido unas críticas profesionales mayoritariamente buenas, juicios que no comparto ni soy capaz de entender, puesto que, desde mi punto de vista, lo único que tiene destacable es la fotografía y algunas localizaciones.
Después del comentario de Ana de esta mañana, que suscribo en todo su fondo, aunque yo no conozco tan bien el texto original como ella, pero plenamente estoy de acuerdo en lo de la mala interpretación, que yo delimitaría fundamentalmente a la pareja protagonista, que en esta obra participa en el 90% de los diálogos.
Y hablando de dicción: hacia la mitad de mi visionado, temiendo que el ronco doblaje en español fuera malo per sé, me pasé a VO y constaté que dicho doblaje trataba mantenerse absolutamente fiel al tono original, vamos que los actores dobladores habían realizado un trabajo de traslación excelente partiendo de una dicción original totalmente inadecuada, en mi opinión. Considero que la responsable de este fallo es el Director de la película, las acotaciones del guión, que en general no me gusta, si es el caso, y la dirección específica de actores. No me puedo imaginar que esta actuación sea decidida por la pareja protagonista, supongo, y, por otra parte, tengo buena opinión de Marion Cotillard, como actriz, por otras interpretaciones suyas anteriores.
Por cierto, lo de quemar vivos a la esposa y los hijos de Macduff en vez de morir simplemente acuchillados es un cambio de guión ¿para darle más dramatismo a la acción?.
El último acto, un completo desastre con el combate en rojo, como señalaba Rogelio. Sólo me atrevería a sugerirle que los “uniformes” no son de ninjas sino más bien de guerreros chinos de Xian, eso sí, con rayas negras verticales pintadas en el rostro que deben tomarse, quizás, ¿por un apoyo a la Juve frente a la eliminatoria contra el Madrid? ¿A lo mejor porque la maquilladora era antimadridista y sabía lo de la próxima eliminatoria de Champions?
Para finalizar sin bromas, prometo no aconsejar ver nada de lo que no me conste su calidad, aunque esta vez lo hiciera, eso sí, con “peros” de advertencia, porque me encanta Shakespeare y entre sus tragedias es “Macbeth” una de mis favoritas, aunque las versiones realizadas por el gran Zeffirelli de “Romeo y Julieta” y “Hamlet” son para mí las cumbres cinematográficas de sus obras. Bueno, sin olvidar la versión “Ran”, de Akira Kurosawa sobre “El Rey Lear” (gracias Miguel Ángel por permitirme verla) y deseando conocer su “Trono de sangre”, que muchos opinan es el mejor “Macbeth” llevado al Cine. De los que yo he visto, me sigo quedando con el de Orson Welles en BN (1948). Ese sí que era buen Cine, Amigos.
Manrique