jueves, 30 de junio de 2016

Sólo le pido a tu dios

! Que sí !

Que yo sólo le pido a tu dios que lo injusto no me sea indiferente.
Que la reseca muerte no me encuentre vacía y sola sin haber hecho lo suficiente.
Que sólo le pido a tu dios que el dolor no me sea indiferente. 
Que tu dolor no me sea indiferente.
Que no me abofeteen la otra mejilla después de que una garra me arañó a esta suerte.
Sólo le pido a tu dios que la guerra no me sea indiferente porque es un monstruo grande y pisa fuerte toda la pobre inocencia de la gente.
Aquí tienes a mi querida Mercedes cantando alto y fuerte y a su lado a León Giego, aquél que supo escribir lo que hacía falta. León, el que tuvo arreos para decir lo que sale del alma a golpe de tambor y fuerte.Si un traidor puede más que unos cuantos, que esos cuantos no lo olviden fácilmente.
Sólo le pido a tu dios que nuestro futuro no me sea indiferente.
Desahuciado está el que tiene que marchar a vivir una cultura diferente, ¡mierda!

No lo olvides... y canta alto, y pisa fuerte tú.
Alza la mirada, grita, pelea, lucha por un mundo mejor, hazlo y ayúdame a hacerlo.Sólo pido que las fuerzas no falten, que siempre el dolor ajeno me turbe, que lo injusto no me sea familiar, que las bofetadas sean de quita y pon. 

Sólo le pido a tu dios que las guerras no me maten, que por muy culpables que sean no puedan vencer la inocencia de la gente.
Sólo le pido a tu dios que yo sea capaz de seguir siendo quien soy.Sólo le pido a ese dios que el engaño no me sea indiferente, si un traidor me puede y unos cuantos lo ven, que esos cuantos no miren a otro lado fácilmente.
Sólo deseo que nuestro futuro no nos sea indiferente. 
Que vivamos una cultura diferente sin ser desahuciados. Sólo quiero que los monstruos grandes no nos pisen fuerte.
Canta, grita, alza tu voz, pelea, siente, padece, ama, entrégate, dime, habla, escucha, siente, haz.
Quiéreme.


lunes, 27 de junio de 2016

El Mal, víctimas y verdugos: "Magical Girl" (España 2014) de Carlos Vermut


Queridos Cinéfilos:

Por puro azar, sin buscarla, simplemente porque se me ocurrió “explorar” La 2 la noche del domingo 12 de junio, empecé a ver “Magical Girl” cuando ya llevaba unos pocos minutos en emisión (película sobre la que no había leído ni una sola crítica, aunque os parezca raro en mí, únicamente me sonaba que a Bárbara Lennie le habían dado el Goya como Actriz Principal), a la buena de Dios, para ver si me interesaba o mejor ponía un dvd de Leonard Cohen con su gira de 2008, sí, ése que he visto ¿25 veces?.

Un cuarto de hora después ya estaba enganchado a la hipnótica película. Cuando terminó, a medianoche casi exacta, decidí, sin la mínima duda, quedarme al coloquio posterior a pesar de la hora.

Luis, el padre (Luis Bermejo), con su hija
    Tras tantos “considerandos”, creo que “Magical Girl” es una de las películas españolas más interesantes de los últimos años y que su director-guionista Carlos Vermut (creo que oficialmente se llama Carlos López del Rey, por cierto, persona físicamente de aspecto muy tradicional, nada en línea con su rompedor seudónimo) se puede sentir orgulloso de su trabajo. Esta es su segunda película; la primera, "Diamond Flash", se "estrenó" únicamente en la red, con muy buenas críticas, y se puede ver por solo 2,95€ en Filmin, cosa que aún no he hecho. 

    Volviendo a “Magical Girl”  le voy a dar un 9 en calidad global; en interés le daré  un 10, todo ello porque:

    Luis buscando ayuda
    • La esencia de la trama es, en mi interpretación, éticamente trascendente e inquietante: cómo una víctima se convierte en verdugo de una nueva víctima, y este ciclo se repite… ¡Cómo me gustan los modelos que recuerdan a la cinta de Moebius!. ¿Será porque nací un día 8?.
    • Me impacta el escalofrío que me recorre cuando constato la existencia del Mal, con mayúsculas, del que nunca he dudado, como, por ejemplo, concluía Coppola en “Apocalypse now”. Como señalan varios críticos, es muy de agradecer al director que, muy inteligente y pudorosamente, opte por no mostrarlo explícitamente y dejarlo a la imaginación del espectador, como hacían los auténticos maestros del buen Cine de terror.
    • La estructuración de la película me parece formidable. Me recuerda a la de “La soledad”, de Jaime Rosales, que aquí alabé hace años. No sé si alguno de vosotros me hizo caso y la vio...
    • Me parece un gran acierto que el guión no nos facilite todos los datos y piezas para permitirnos que, al final, consigamos tener completo el puzle, como siempre ocurría con los casos de Poirot. A algunas personas les puede disgustar que sea así. Yo lo celebro: el resultado es que nos faltan piezas, como siempre ocurre en la vida real.
    • Respecto a las interpretaciones, excelentes los tres personajes principales, Bárbara Lennie, José Sacristán y Luis Bermejo, este último completamente desconocido para mí con anterioridad. Muy adecuada la niña debutante, Lucía Pollán, Bien el resto.
      Bárbara (Bárbara Lennie) y Damián (Pepe Sacristán)
      • Las localizaciones y la fotografía, sobresalientes.

      Entonces, ¿cuál es el “pero” para bajar de 10 de interés al 9 global? En mi opinión, algunos pequeños defectos del guión y un posible forzamiento para conseguir cerrar un “ciclo” perfecto. No puedo dar más pistas.

      Os aconsejo firmemente que la veáis en vuestra casa, disponiendo para ello del enlace gratuito de rtve.es que adjunto o mediante un pequeño pago en alguna web perfectamente legal.

      ¿Y qué opina la crítica profesional?. Pues le da, en general, excelente nota y con análisis más finos que el mío. Para vuestro conocimiento adjunto, como es habitual, los siguientes enlaces de referencia:

      Alicia (Lucía Pollán) con su ansiado traje
      Presentación de la película en el programa semanal “Días de Cine” en La 2 de TVE (7 min, incluyendo el tráiler de fondo):

      La película íntegra disponible “A la carta” en rtve.es (116 min), ahora hasta el 16.05.2024:

      Presentación y coloquio posterior en TVE2:

      Crítica de Oti R. Marchante en ABC: “Caperucita, o el Lobo”

      “Hay un extraño desapego de Vermut hacia el interior de sus personajes, pues nos los muestra en toda su complejidad y ciclotimia como quien disecciona un insecto, pero, al tiempo, nos los hace cercanos, comprensibles en su sordidez?, como si los quisiera encuadrar en un ambiente sucio, agresivo, de mundo en crisis, de actualidad perversa, de desesperación justificada. Y es al tiempo una película que no elude lo peor, lo más oscuro, y hace una elipsis que se agradece al dejarnos a este lado de la puerta cerrada a terribles secretos. Es, pues, una película sin fórmula, sin género, que no presume de su aire metafórico, que esconde o confunde la bondad y la maldad de sus personajes, que presenta un perfecto tramado y sugiere su doloroso reverso, y que tiene, además de la enorme interpretación de José Sacristán con su temor a sí mismo, la de la hipnótica Bárbara Lennie y el sorprendente Luis Bermejo”

      Opinión de Carlos Boyero en El País: “Turbias ficciones, horrores reales” 

      “Un raro en el mejor sentido el tal Carlos Vermut, un raro con talento, no un vacuo profesional de la impostura pretenciosa”

      Carlos Vermut, director-guionista
      Comentario de Luis Martínez en El Mundo “Un precipicio en la parte de atrás”

      “'Magical girl' es el ejercicio de cine más interesante, profundo y cabal que ha conocido el cine español en tiempos. Y todo ello con un único propósito: hacer dudar, volver la mirada hacia el vacío que necesariamente se abre a los pies. Otra producción es posible. La realidad como enfermedad”
      http://www.elmundo.es/cultura/2014/10/17/543fd79822601daf658b458b.html

      Buen Cine, Amigos. No os lo perdáis. Os interesará mucho, espero.

      Y, por favor, los que finalmente la veáis, compartid vuestros comentarios en el Foro.

      Manrique

      lunes, 20 de junio de 2016

      El crómlech de los almendros

      En un reciente viaje a Lisboa para celebrar mi jubilación, habíamos decidido parar a comer en Évora, pero nada más salir de la autopista vimos una indicación: “Cromeleque dos Almendres”. En mi vida había visto un crómlech, así que no lo dudamos. Por una carretera secundaria llegamos en unos minutos al pueblecito de Nuestra Señora de Guadalupe, del que arrancaba una pista de tierra, con sendos carteles indicando el crómlech y el menhir de Os Almendres.
      Con mucha precaución para no golpear los bajos del coche, nos adentramos unos cinco kilómetros en una dehesa, hasta encontrarnos con la maravilla: En lo alto de un cerro, sobre una ladera orientada al este y con unas vistas espectaculares de la campiña circundante, se extendían los crómlechs, porque en realidad eran dos. Uno, formado por tres círculos concéntricos, de unos ocho mil años de antigüedad, y otro constituido por dos elipses también concéntricas, de “solamente” cinco mil años. Algunas de las piedras, de entre uno y dos metros de alto, mostraban vestigios de petroglifos, pero bajo el inclemente sol del mediodía era casi imposible distinguirlos.
      Según el panel situado en el aparcamiento, representaban el sol, la luna, las estrellas y algunas figuras antropomorfas, pero la verdad es que no fui capaz de reconocer ninguna de estas imágenes. Parece mentira que hace ya ocho milenios que un grupo de personas dedicaran una tremenda cantidad de trabajo (sin ruedas, sin animales de tracción, solo a fuerza de brazos y como mucho de rodillos) a mover unas cien piedras y levantar aquel monumento para mayor gloria de sí mismos, o de sus dioses si es que los tenían.

      Lo único que se sabe a ciencia cierta es que los dos centros de la elipse y el del círculo están en línea recta y que coinciden con la orientación Este-Oeste, marcando así los puntos de salida y puesta del sol durante los equinoccios. Pese al calor (mediodía de junio, a pleno sol), el lugar impresionaba e invitaba a quedarse, disfrutando de las sensaciones y de la paz. Los pocos visitantes (alemanes en su mayoría) guardábamos un respetuoso silencio, y no se oía ni una voz, ni un sonido telefónico, ni siquiera un silbido de Twitter. Solo el murmullo del viento entre las hojas de los alcornoques, el zureo de una pareja de palomas torcaces y el golpeteo de un pájaro carpintero en un pino cercano ponían la música de fondo.
      En el mismo panel informativo de la entrada leímos que en la comarca se conservaba un número considerable de dólmenes, menhires, crómlechs y otros vestigios neolíticos. Intentaré volver en otra ocasión para irlos recorriendo con base en Évora.
      Volvimos por la misma pista, y antes de llegar al pueblo dejamos de nuevo el coche, para caminar unos doscientos metros por un senderito entre sembrados y alcornoques y llegar al menhir de Los Almendres. Una única piedra de granito, de tres o cuatro metros de alto, se erguía en un claro en lo alto de otra colina.
      Al parecer, si no fuera por los árboles el menhir se vería desde los crómlechs, y la línea que lo unía con el centro del círculo marcaba exactamente el nacimiento del sol en el solsticio de verano, una de las fiestas más universales entre los pueblos primitivos y otros no tan primitivos, que los católicos se han apropiado como noche de San Juan. Al monolito le calculo unas veinte o treinta toneladas; ni el mismo Obélix habría sido capaz de colocarlo allí sin ayuda.
      No puedo dejar de hacer mención a los para mi desconocidos propietarios de la Herdade dos Almendres, el cortijo en cuyas tierras se encuentran estos monumentos, que no solo permiten el acceso sin restricciones sino que mantienen en buen estado el entorno.

      miércoles, 8 de junio de 2016

      Jaque al rey

      Jaque al rey, segunda parte de House of Cards
      Michael Dobbs
      Cuenta el autor, al final de la novela, (en los agradecimientos), que fue su tía quién lo puso todo en marcha; ya que le llamó por teléfono  a medianoche, tras la emisión del último episodio de la serie House of cards,  de la BBC, para quejarse: << ¡Han dejado que el muy desgraciado se saliera con la suya!>>
      No es la primera vez que el autor se siente motivado por alguien de su entorno para iniciar una nueva novela. Me cae simpática esta actitud y, además por qué no va a ser verdad.
      Hubo un tiempo en que a los reyes se les cortaba la cabeza, como a Carlos Estuardo, defensor de la fe y rey por derecho hereditario de Gran Bretaña e Irlanda, en 1649. Hoy en día, los reyes se ven obligados a abdicar, no pueden decir lo que piensan y se deben mostrar siempre de acuerdo con el primer ministro.
      La novela arranca con la renuncia de Henry Collingridge como primer ministro y la elección de Francis Urquhart. Es importante este cambio, ya que el nuevo primer ministro no llega después de unas elecciones, sino después de una serie de intrigas que se relatan en la primera parte.
      Francis Urquhart comenta con su esposa, después de despachar con el rey. ” El trabajo de rey es dar fiestas en el jardín y librarnos de la molestia de elegir a algún otro como presidente, no andar por ahí interfiriendo en los asuntos de Gobierno”. No se caen bien el rey y el primer ministro, lo que desencadenará una lucha de poder a poder.
       Benjamin Landless, magnate y amo del Telegraph,  tampoco tiene muchos escrúpulos a la  hora de destruir la carrera del hombre que está a punto de renunciar al poder y al prestigio del cargo de primer ministro, Henry Collingridge, a favor de Francis Urquhart. Con el lema: la información es poder y dinero, intentará convencer  a Sally Quinn, una periodista americana, llegada al Reino Unido huyendo de su Boston natal, de un divorcio y de la pérdida de un hijo, para que, como experta en sondeos de opinión, colabore con él; << porque los sondeos de opinión no son análisis objetivos. Son noticias. Si un editor quiere que un asunto se mueva, les encarga a personas como usted que investiguen un poco. Conoce las respuestas que quiere y el titular que va a sacar, tan solo necesita unas cuentas estadísticas para que el asunto tenga visos de autenticidad. Los sondeos de opinión son las armas de la guerra civil. Acabar con un gobierno, demostrar que la moral nacional está siendo masacrada, establecer que todos queremos a los palestinos o detestamos el pastel de manzana. No se necesitan hechos, sólo la aprobación de un sondeo de opinión>>.
      Con estos tres pilares de personajes, Michael Dobbs escribe una novela política, en la que hay muy poco de política y mucho de venganza personal.
      Hay muchos que creen que la política es supervivencia, pero Urquhart va un poco más lejos, ¿De qué servía entablar la batalla de ideas y de egos si al final a uno sólo le quedaba la supervivencia? El éxito en la política requería sacrificios, preferentemente de los demás y él ya había sacrificado lo suficiente en su momento. Amigos, colegas, los más cercanos a él. Había empujado, dado codazos, los había arrojado  desde azoteas y bajo las ruedas de la opinión pública. Y nunca se arrepintió. El liderazgo traía consigo unas responsabilidades asombrosas e ineludibles con respecto a la vida y la muerte, y él sabía que era digno de semejantes decisiones.
      Landless también habla de supervivencia cuando Sally le pregunta: ¿qué saco yo?  Y responde: Una garantía de supervivencia y, añade, una oportunidad de ganar mucho dinero, de llegar a donde quiere llegar, a la cima. De demostrarle a su exmarido que no solo puede sobrevivir sin él sino que encima puede triunfar. Es eso lo que quiere, ¿no?
      Todo esto ocurre el mismo día de diciembre, de la primera semana. A partir de aquí y hasta la segunda semana de febrero del siguiente año y en poco más de trescientas páginas asistimos a cambios inesperados.
      Me parece una lectura muy recomendada, precisamente ahora, que estamos en vísperas de elecciones.
      Una aclaración: en todo momento mi comentario va dirigido al libro de Michael Dobbs, Jaque al rey y nunca a las versiones de las series de televisión (BBC y Netflix) que como ya comenté en su momento difieren sensiblemente.

      Buen día de elecciones y mejor lectura.