lunes, 11 de septiembre de 2023

Vuelta a casa tras el veraneo, que inicié conociendo Oiquixa, el pueblo pesquero vasco cuya mágica existencia me desveló Ana María Matute en su "Pequeño teatro"

Portada de mi edición
Queridos Cinéfilos

Hay un viejo refrán que dice "El buen paño, en el arca se vende" pero me temo que la opresiva "atmósfera" del presente siglo, hiper saturada de informaciones variopintas no demandadas, actúa como un bosque de árboles muertos que nos oculta la vista de los mejores ejemplares vivos. Por ello considero que cada vez que tenemos la suerte de encontrar una "perla literaria, cinematográfica o de otra categoría", entre tantas "ostras podridas", debemos compartirla en este Foro

He tenido la inmensa suerte de encontrar tres en estos últimos meses, por lo que voy a hacerlo hoy con la primera, muy brevemente porque esta "perla" no necesita ningún complemento para ser apreciada por lectores con buen gusto, como estoy seguros que sois. 

Se trata de "Pequeño teatro", una encantadora novela que escribió Ana María Matute con ¡diecisiete años!, informa Soledad Puértolas en el prólogo de la edición que he leído (2001, colección "Las cien mejores novelas en castellano del siglo XX" de El Mundo) y que diez años después, en 1954, presentó al premio Planeta, que ganó. 

A mí me ha encantado, por las siguientes razones:
Recibe el Planeta por "Pequeño teatro" en 1954 
  • La juvenil frescura de su "estilo", supongo que revolucionario para el jurado del premio de esa época. 
  • La "elaboradamente" sutil presentación de sus personajes, no más de diez, tres de ellos protagonistas, lo que no se puede conseguir sin una sagaz estructuración de la aparición en escena y caracterización de cada uno por su circunstancia y actos, no por "declaraciones" de un narrador omnisciente.
  • Por la trama de melancólica maduración de dos de ellos, el adolescente Ilé Eroriak (vamos, "Pelos caídos") y la muy joven Zazu (diminutivo de Aránzazu) tras la llegada del marino extranjero, el tercero, que alterará las vidas de los habitantes de kale Nagusia, la calle principal de Oiquixa, y hasta de los de su barrio de pescadores, San Telmo. La historia se desarrolla en unos meses de un tiempo no determinado de las primeras décadas del siglo XX, con un trasfondo de poética sensibilidad. Gran mérito éste en una autora tan joven, como lo era Ana María Matute cuando la escribió.
  • Porque me atraen sobremanera esos pueblos pesqueros de la costa norte española y cómo la autora es capaz de reflejar su ambiente y la mentalidad de los diversos habitantes de ese microcosmos.
  • Y, por no alargarme ni desvelar más, porque me parece genial el guiño metafórico de haber incluido el personaje secundario de Anderea, el anciano dueño del teatro de marionetas, cuyas "obritas" son el único espectáculo disponible del pueblo. ¿Imagen de las propias vidas de sus habitantes?
Su dedicatoria de "Primera memoria"
El 24 de abril de 2011 Ana D. publicó aquí una fundada glosa sobre esta excelente autora con motivo de la entrega del Premio Cervantes, que se le había concedido ese año. 
Siguiendo su consejo, en la Feria del Libro compré un ejemplar de "Primera Memoria", Premio Nadal 1959,  que la Autora me firmó con una cálida dedicatoria. La leí, me encantó y aquí os la recomendé. Aviso que por la  profundidad social de la trama y mayor madurez de la autora, esta novela, excelente según nos adelantó Ana D. en otro comentario, es muy diferente a "Pequeño teatro", que es la que "toca" hoy.

Pues nada más que aconsejaros leerla y rogaros, Cinéfilos, que publiquéis aquí vuestra opinión sobre ella, coincidente o enriquecedoramente corrigiendo la mía.

Buena Literatura, Amigos.

Manrique

Añado un excelente complemento para conocer a Ana María Matuteel enlace al muy ameno programa "Imprescindibles: La niña de los cabellos blancos" (58 min) que La 2 de TVE emitió en su honor el 04.01.2013.